2020/11/30 - 09:22

Asno, jumento, pollino, borrico, bornito, burro, etc… Son los diversos nombres que recibe el Equus africanus asinus, animal noble usado para la carga que según fábulas griegas se caracteriza por ser: -necio, incapaz de aprender y sobre todo obedecer a su dueño-, fama que hasta nuestro siglo se mantiene. Pero el burro es todo menos tonto, son los animales preferidos para andar en las zonas serranas y caminos malos ya que a diferencia de los caballos, son muy cuidadosos al caminar, y cuando un burro está cansado no hay poder humano que lo mueva.

Difícilmente se verá a un rico hacendado en un burro, pa’  ellos están los caballos, los grandotes,  aquellos que le dan presencia, ¡que hacen que se vea el chingao poder pues!, el burro es pal campesino pa’ que cargue por él. Un burro ensillado es una aberración ante los ojos de los poderosos. Porque una silla de montar es pa caballos.

Pero así como un burro ensillado se ve bastante raro, un caballo con un fuste y cargado de leña se ve a un más extraño. En estos tiempos de política, pupulan por doquier los caballos enfustados, unos cargando despensas, otros cargando materiales para la construcción, entregando medicamentos, visitando a la “burrada” para que voten por ellos, diciendo –¡Miren soy como ustedes  porque llevo un fuste tambien!-, Solo que en el establo, la cosa es diferente, al caballo le dan vitaminas, lo bañan, la mejor pastura, y a la burrada lo que sobre, esos aguantan con lo básico, no les falta más.

El caballo enfustado me recordó  una película de Antonio Aguilar, donde enfusta un caballo de carreras y se hace pasar por campesino para poder apostar y ganarle a los hacendados de otros pueblos.  Esta semana Flor Silvestre murió  y con ella se fue una parte de esa generación que le dio identidad a nuestro país. 

No recuerdo si existe algún corrido que mencione a un burro, pero en el cine el burro que habla en Sherk se llevó la película, en la Rebelión en la Granja de Orson Well, el caballo da su vida para salvar al burro porque los cerdos se apoderaron del mando y los hicieron trabajar hasta morir, al final ellos se rebelaron y el que lideró al grupo fue el burro.

¿Pero qué puedes esperar de un burro? Fue lo que  dijo de Maradona, el presentador de radio y televisión argentino Mario Pergolini,  cuando le preguntaron su opinión acerca de un mensaje de Maradona que criticaba  a Juan Román Riquelme y a Jorge Amor Ámela durante la contienda por la presidencia del Club Boca Juniors. Y vaya que fue burro el Pelusa, necio con ganas, y se movía a su voluntad y no obedeció a los que quisieron ser sus dueños. 

¡El miedo no anda en burro!, eso pensamos cuando escuchamos que los comerciantes del centro de Xalapa, se apresuraron a cubrir sus negocios con barricadas ante el anuncio de la marcha feminista por el día de la no violencia hacia la mujer, la cual en comparación con otras ocasiones fue menos violenta, tal vez por las mencionadas barricadas y los cordones de policías en el centro de la ciudad.   

Así que la próxima vez que alguien le diga burro(a) no se ofenda, así como en 1874 los republicanos y demócratas en estados unidos no se ofendieron de una caricatura de Thomas Nast, donde retrataba a los demócratas con un burro disfrazado con piel de león que asusta a los animales, entre ellos un elefante que representa a los republicanos. Ambos partidos en vez de ofenderse, utilizan hasta la fecha esos símbolos como mascotas.