Lo comenté ayer, pero su trascendencia merece entrar a los detalles: Estados Unidos cerró sus fronteras para la importación de ganado bovino proveniente de México y del resto de América, luego de que fue informado de la presencia en este país de la plaga del Gusano Barrenador de Ganado. *** Aunque en su comunicado la Secretaría de Agricultura del gobierno federal (Sader) utilizó el eufemismo “de manera temporal”, lo cierto es que la venta de ganado a nuestro más importante cliente, Estados Unidos, no se reanudará en el corto plazo, en espera de que se logren certificaciones de organismos internacionales, que confirmen que nuestra producción está libre de esa terrible larva. *** Para tener una idea del impacto que esta medida tiene para la economía de México, baste decir que en el ciclo 2022-2023, los ganaderos de México comercializaron 901 mil 754 cabezas de ganado en pie, una cifra superior por más de 80 mil cabezas que en el ciclo anterior, de los que 710 mil 427 fueron becerros y 191 mil 327 vaquillas. *** El ganado que se exporta a Estados Unidos proviene de nueve entidades que contaban con certificaciones para demostrar que cumplían con el estatus sanitario requerido por las autoridades sanitarias estadounidenses. *** Esos estados son Campeche, Chihuahua, Coahuila, Durango, Nuevo León, Sonora, Tamaulipas, Veracruz y Yucatán. *** Tan sólo en el 2023, las exportaciones de ganado a Estados Unidos significaron 3 mil millones de dólares. México es el segundo proveedor de carne de res y productos derivados de Estados Unidos y representa el 20% de las importaciones totales estadounidenses. *** Veracruz posee el hato ganadero más grande de todo el país y su calidad es reconocida, pero ante una amenaza tan seria como la del Gusano Barrenador, las autoridades sanitarias en Estados Unidos disponen la cancelación de todas las importaciones de carne y ganado de res que pase por territorio mexicano. *** Este mismo año Veracruz fue observado por las autoridades zoosanitarias del vecino país del norte porque no se están cumpliendo, en esta entidad, los protocolos de supervisión y prevención de plagas en el ganado.

 

 

Parecía imposible, pero el titular de la Secretaría de Infraestructura y Obra Pública (SIOP), Elio Hernández Gutiérrez, lo consiguió: logró que hasta los legisladores del partido en el poder asumieran una actitud crítica sobre su desempeño en esa dependencia.

No se explican cómo es que se permitió que las carreteras estatales quedaran en tan malas condiciones y no se tragan el cuento de que “faltaron recursos”, pues esa fue una de las instancias que en los años recientes incurrió en subejercicio; esto es, que al término del año la dependencia no se gastaba la totalidad de su presupuesto.

Menos creen que se trate de falta de recursos, cuando su titular reveló este lunes que otras instancias del gobierno estatal estuvieron haciendo el trabajo que la correspondía a la SIOP.

Elio Hernández Gutiérrez fue cuestionado sobre las malas condiciones en que se encuentra la carpeta asfáltica de la vía corta Xalapa-Coatepec, y el funcionario se apresuró a aclarar que ese trabajo no le tocó a su oficina, que fue la Secretaría de Gobierno, en los tiempos en que su titular era Eric Cisneros, la que se encargó de contratar a una empresa privada para realizar el asfaltado.

“A la SIOP -dijo- sólo le correspondió hacer trabajos para preparar la base de esa carretera, pero la aplicación del asfalto la hizo la Secretaría de Gobierno, durante la gestión de Eric Cisneros Burgos”.

El asfalto que se aplicó fue donado por Pemex.

Y aunque las obras en la avenida Lázaro Cárdenas de Xalapa sufrieron un severo retraso, ahí la culpa fue de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y de la Comisión de Agua del Estado de Veracruz (CAEV), que no aportaron a tiempo la información que se requería.

No faltó quién le recordara las expresiones hechas hace muy poco tiempo por el senador de Morena, Manuel Huerta, quien aseguró que muchos funcionarios del gobierno estatal “se robaron el dinero” y por eso nunca se vio el resultado de su trabajo, y puso como ejemplo la SIOP y la Procuraduría del Medio Ambiente.

Por supuesto, evadió la respuesta. Tiene claro que no es el mejor momento para medir fuerzas.

Lo que cada día es más evidente, es que no hay “línea” a los nuevos diputados para que defiendan al actual gobernador. Quienes lo hacen, son aquellos que tienen especial interés, porque formaron parte de su equipo.

La comparecencia de Cuitláhuac García no será tan tersa como las de años anteriores.