Misantla, Ver. | 2025/01/21 - 20:02

Gabriel Mújica.- La feroz ola de frío que azota Chiconquiaco, Las Vigas, Tlacolulan, Tenochtitlán, Miahuatlán, Tonayan y Perote, entre otros municipios de Veracruz ha puesto a miles de habitantes al borde del colapso. Con temperaturas que se desploman dramáticamente, las heladas no solo afectan a quienes tienen hogar, sino que representan un grave riesgo de muerte para indigentes y personas en situación de calle, quienes enfrentan estas condiciones sin refugio ni protección.

Protección Civil ha emitido un llamado urgente para que los habitantes permanezcan en sus hogares y extremen precauciones, advirtiendo que el contacto prolongado con el frío extremo podría resultar letal. Mientras tanto, las calles de estos municipios son testigos de una creciente crisis humanitaria, con organizaciones locales intentando repartir cobijas y alimentos calientes a quienes más lo necesitan, aunque los recursos se agotan rápidamente, grupos de ayuda apoyan a los que más necesitan y por WhatsApp se comunican para ayudar.

La situación es especialmente crítica en zonas rurales y marginadas, donde la falta de infraestructura para enfrentar este tipo de fenómenos climáticos agrava el panorama. Hospitales de la región han comenzado a prepararse para atender casos de hipotermia y complicaciones respiratorias, pero la respuesta ha sido insuficiente ante la magnitud del problema, pues las enfermedades en vías respiratorias van en aumento.

Expertos advierten que las temperaturas podrían continuar descendiendo en los próximos días, aumentando el riesgo de una tragedia humanitaria si no se toman medidas inmediatas. Indigentes, adultos mayores y niños son los más vulnerables, y las autoridades insisten: “¡Permanecer en casa y ayudar a quienes lo necesiten podría salvar vidas!”