CDMX | 2019/02/28 - 09:42

El Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) realizó una donación multiorgánica en el Hospital Regional de Alta Especialidad “Centenario de la Revolución Mexicana” en Morelos, con lo que se salvó la vida de cuatro personas con trasplante de riñones y córneas, para mejorar su calidad de salud.

En el marco del Día Mundial del Trasplante de Órganos, el Director General del Instituto, Luis Antonio Ramírez Pineda, exhortó a la población a continuar sumándose a la acción altruista de donar, pues de acuerdo con datos del Centro Nacional de Trasplantes (CENATRA), al cierre de 2018 se registraron más de 21 mil 800 personas en espera de un órgano.

Ramírez Pineda exaltó la labor de los profesionales que integran los comités de procuración y trasplante en hospitales acreditados y agradeció su profesionalismo por estar dispuestos a realizar la dedicada labor de obtener donaciones y realizar las cirugías para llevar vida y salud a los pacientes que lo necesitan, con una disponibilidad las 24 horas, los 365 días del año.

Durante el procedimiento médico, el Director del Hospital “Centenario de la Revolución”, Marco Pedro Romero Flores, informó que el donante, de 46 años de edad, sufrió una caída de dos metros que le causó traumatismo cráneo encefálico. “Al llegar al nosocomio presentó daño y muerte cerebral, e inició el protocolo de procuración de órganos. La familia aceptó, y gracias a su generosidad a favor de la preservación de la vida, se logró la donación de dos riñones y ambas córneas”.

Agregó que un riñón se trasladó a Puebla, otro al Centro Médico Nacional “La Raza” del IMSS y las dos córneas al Hospital Regional “Lic. Adolfo López Mateos”, los cuales ya fueron trasplantados de manera exitosa.

Por su parte, el Coordinador Institucional de Trasplantes del ISSSTE, Aczel Sánchez Cedillo, afirmó que “los trasplantes de órganos y tejidos son la mejor terapia sustitutiva desde los puntos de vista humano, social y económico para tratar a pacientes con daños irreversibles en su salud a consecuencia de enfermedades crónicas avanzadas, por lo que el reto en México es incrementar infraestructura, recursos y donación altruista.

Comentó que en el caso de los pacientes afectados por insuficiencia renal crónica “si bien la inversión inicial de la cirugía de trasplante es alta, las terapias sustitutivas de diálisis y hemodiálisis son hasta 10 veces más caras a largo plazo que la terapia de inmunosupresión que requiere el paciente trasplantado, sin contar el gasto en medicamentos, tratamiento de complicaciones y múltiples periodos de hospitalización”.

Sánchez Cedillo puntualizó que con el trasplante el paciente cura la insuficiencia renal mientras que, con diálisis o hemodiálisis, sigue enfermo y en proceso de deterioro, “pues si bien estas terapias limpian de toxinas al organismo lo hacen no de forma continua como un riñón sano, sino de manera intermitente y no pueden realizar otras funciones renales como la producción hormonal para el correcto funcionamiento del sistema cardiovascular y para el metabolismo del calcio y el fósforo”.

El especialista del ISSSTE recomendó a quienes han decidido donar en caso de fallecimiento, comunicar su voluntad a sus seres queridos para que se respete su deseo y sea posible mejorar y salvar vidas.