CDMX | 2024/11/05 - 00:00

Reportero Web.– El líder nacional del Partido Acción Nacional (PAN), Marko Cortés, advirtió que México podría encaminarse hacia una dictadura, similar al modelo descrito en la película La Ley de Herodes, si continúa la actual administración de Morena. En sus declaraciones, el también senador denunció lo que calificó como una “política depredadora, infame y absolutista”, donde una sola persona y un partido político controlan el poder, desoyendo las instituciones y silenciando a la oposición.

Cortés señaló que el gobierno de Morena no solo ha utilizado su mayoría en el Congreso para aprobar reformas de manera apresurada, sino que también ha iniciado una “cacería de brujas” contra jueces y ministros que defienden la independencia del Poder Judicial. En particular, expresó su preocupación por la reforma judicial que está en discusión, la cual considera una amenaza para la democracia y los derechos fundamentales de los ciudadanos.

El dirigente panista confió en que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) actuará con libertad e independencia al resolver las impugnaciones contra la reforma judicial, cuya votación está programada para este martes. Cortés subrayó la importancia de que los ministros protejan el bienestar del país y eviten que las reformas impuestas por Morena conduzcan a la erosión del sistema democrático.

En su comunicado, el líder del PAN también se refirió a la reciente aprobación de la reforma sobre la supremacía constitucional, señalando que este cambio no debe eliminar las impugnaciones a la reforma del Poder Judicial, ya que, según él, representa un intento por consolidar un régimen autoritario.

“Estamos presenciando una política donde solo una persona y un partido gobiernan, ignorando las instituciones y atacando a quienes defienden la justicia”, afirmó Marko Cortés, quien también hizo una referencia explícita a La Ley de Herodes, la película dirigida por Luis Estrada, que presenta una crítica mordaz al autoritarismo del régimen priista en México. En el filme, el personaje principal, interpretado por Damián Alcázar, altera las leyes y la Constitución para su propio beneficio, un paralelo que Cortés destacó como preocupante en el contexto actual.

Finalmente, el senador confió en que la SCJN invalidará la reforma judicial, reafirmando su esperanza de que la mayoría de los ministros declare la reforma como inconstitucional, con el objetivo de proteger la autonomía del poder judicial y evitar que el país se deslice hacia un sistema de control absoluto.